viernes, 10 de julio de 2015

CEREZAS EN ALMIBAR Y CONFITURA DE CEREZAS



La Baronesa Frambuesa adora las cerezas, esta fruta  tan del verano, del buen tiempo, que siempre recuerda a los juegos de la infancia, con las cerezas colgadas en las  orejas a modo de pendientes. Actualmente en cualquier época del año podemos conseguirlas, eso sí, pagándolas a precio de perla, no es extraño encontrarlas en plenas Navidades por el "módico" precio de 20 euros el kilo. Ella es caprichosa, pero de manirrota, tiene lo justo, o sea, nada. Así que no está dispuesta a que este capricho en pleno invierno, la lleve a la ruina, no sea que acabe recordando el Jardín de los Cerezos (cuando le da por exagerar no tiene limites!...), por ello, hace acopio en plena temporada para llenar su despensa. Después, como la hormiga, echará mano de todo lo guardado para preparar selva negra o cualquier otra tarta que precise cerezas en pleno invierno. Así se prepara para el invierno esta hormiga (de natural cigarra): con montañas de cerezas en almíbar y mermeladas





CEREZAS EN ALMÍBAR



cerezas
azúcar
agua
vainilla

Estas cerezas no son propiamente cerezas en almíbar, para que lo fueran deberían llevar una cantidad muy superior de azúcar, que es lo que las conservaría durante tiempo. También deberíamos envasarlas .al vacío para evitar problemas serios. Conservo las cerezas escurridas en bolsas de congelación de, aproximadamente, 400 gramos, lo que es suficiente para realizar una buena Selva Negra, un clafoutis, un flan, o cualquier tarta.  El liquido de cocerlas lo congelo en bolsas de cubitos de hielo, será muy útil combinado con algún licor, para calar la base de cualquier tarta, aportará  el color de la cereza y también un gusto especial.  Es una manera  de conservar las cerezas y tenerlas a mano en cualquier época, sin conservantes ni colorantes de ningún tipo.  No las deshueso para cocerlas, esto lo  hago cuando voy a utilizarlas, pero cada uno lo hace a su gusto

1. Lavamos las cerezas y las colocamos en una olla, cubrimos con agua

2. Añadimos azúcar. La cantidad será poca aproximadamente "solo" 150 gramos por kilo, y también una vaina de vainilla abierta por la mitad.
Podríamos añadir para cocerlas algún licor pero, como posteriormente las congelaremos a la espera de utilizarlas, creo que es mejor añadirlo cuando vayamos a utilizarlas

3. Cocemos aproximadamente media hora a fuego medio, apagamos el fuego y dejamos enfriar
.
4. Envasamos en bolsas y congelamos

Cuando voy a utilizarlas, las descongelo y les doy un hervor en el mismo liquido que las cerezas habrán soltado al descongelar, ajustando en ese  momento el punto de azúcar y licor, según la preparación, aunque personalmente no creo que necesiten más dulzor.




CONFITURA DE CEREZAS






cerezas picotas
azúcar (la  mitad del peso de las cerezas)
zumo de limón 
agua

1. Lavamos y deshuesamos las cerezas, podemos hacerlo a mano (presionando desde la base saldrá perfectamente la pepita), o bien,  utilizar el aparato especial para ello.

2. En una olla colocamos el azúcar y algo de agua , aproximadamente 60 ml por cada 200 gramos de azúcar. Llevamos al fuego, cuando el almíbar llega a la ebullición, dejamos cocer 5 minutos a fuego medio. En este caso he utilizado  200 gr. de azúcar y 400 de picotas, para mi es más que suficiente, pero claro cada uno tiene su gusto en cuanto al dulzor

3. Añadimos las cerezas y el jugo que han soltado al deshuesarlas, añadimos también dos  cucharadas sopera de zumo de limón por cada 200 gr de azúcar. Llevamos a ebullición

4. Cocemos, a fuego medio, aproximadamente media hora, removiendo de vez en cuando. Retiramos del fuego cuando aun parece algo liquido, al enfriar espesará, por lo que si nos pasamos de cocción la consistencia sera demasiado espesa pero, como siempre, dependerá del gusto de cada uno.








jueves, 2 de julio de 2015

BIZCOCHO DE NUTELLA, BIZCOCHO DE CAFÉ , BIZCOCHO DE CHOCOLATE BLANCO



A pesar del calor la Baronesa Frambuesa sigue desayunando todos los días...bueno, ella y todos. Para no perder las buenas costumbres un bizcochito a la semana sigue siendo una buena opción. Como con estas temperaturas no apetece mucho encender el horno, hay que aprovechar y matar dos pájaros de un tiro y si son tres, mejor que mejor. Así que prepararemos estos tres al mismo tiempo y nos olvidaremos del horno hasta que el calor afloje, que con la temperatura exterior ya tenemos bastante



INGREDIENTES:
para 3 moldes pequeños de plumake de 400ml cada uno

200 ml. de nata
200 ml. de azúcar (180 gr., aprox)
400 ml. de harina (220 gr. aprox.)
4 huevos (uno por cada 50 ml de nata)
1 sobre de levadura

- para el bizcochito de Nutela-
75 ml. de nutela

- para el bizcocho de café-
2 sobres de café soluble
50 ml. de licor de café

- para el bizcocho de chocolate blanco-
50 gr. de chocolate blanco
2 cucharadas soperas de Nocilla blanca

ELABORACIÓN:

1.Batimos la nata con el azúcar.
2. Añadimos las 4 yemas y batimos
3. Tamizamos la harina mezclada con la levadura y mezclamos bien
4. Separamos la masa en tres partes.
5. Batimos las claras a punto de nieve y reservamos.

6. Bizcocho de Nutela: mezclamos la nutela con dos cucharadas de la masa correspondiente, cuando esté bien mezclada, añadimos a la masa, mezclando pero sin que quede perfectamente uniforme. 
7. Añadimos un tercio de las claras. Vertemos la masa en el molde




8. Bizcocho de café: calentamos el licor ligeramente y añadimos el café soluble. Añadimos a un tercio de la masa, mezclamos bien
9. Añadimos un tercio de las claras, incorporamos con cuidado y vertemos en el molde correspondiente



10. Bizcocho de chocolate blanco: Calentamos el chocolate blanco en el microondas a baja temperatura, con cuidado de no quemarlo. Añadimos a la nocilla blanca y mezclamos.
11. Añadimos la mezcla a un tercio de la masa, mezclamos bien.
12. Añadimos un tercio de las claras, mezclamos con cuidado de no bajarlas. Vertemos en el molde



13. Introducimos lo moldes en el horno precalentado a 200 grados y horneamos, aproximadamente 25 minutos. Comprobamos con un palillo o brocheta y si sale limpio retiramos del horno. Esperamos 5 minutos, desmoldamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.

Éste es un bizcocho clásico de nata, la proporción es 1 medida de nata, 1 de azúcar y 2 de harina, completado con un huevo por cada 50 ml. de nata. Es un bizcocho que resulta más seco que el cuatro cuartos elaborado con mantequilla,  por lo que es necesario aportarle algún ingrediente humedo y controlar no pasarse de horno o, de lo contrario, resultará excesivamente seco.